The calling (2014)
Podemos no creer en una religión pero se dice que de tanto repetirse algo por miles de voces puede hacerse real, palpable, incluso aparecer, una de las premisas de esta película comienza en esta idea.
Basada de una novela escrita por Inger Ash Wolf (Michael Redhill) donde nos hace debatir sobre la existencia de Dios ¿esto sucedió de forma natural o ha sido creado por un ente poderoso llamado Dios?
Podría pensarse que la película va sumamente dirigida a que creamos en un Dios, en alguien divino, no en el Dios que se nos ha presentado en la religión sino alguien que nos está viendo, nos guía, nos está llamando, sin embargo, la película se desarrolla entre lo que podemos creer sobre los personajes (sobre todo en el personaje principal que aparentemente está envuelta en algo muy sucio) y en gran medida a como los actores llevaron su personaje.
El hecho de que toda la película se desarrolle en un pueblo de Ontario, también nos mete en un contexto completamente diferente, un pueblo donde casi nada sucede, los policías tienen un trabajo de ayudar a la comunidad y sobre todo a la jefa, una persona enferma que tiene bastantes problemas, agregando un estrés más intenso, donde personas están siendo asesinadas por alguien que cree ser parte de los cielos.
¿De dónde venimos, quienes somos, a dónde vamos? Son varias las preguntas que me hice cuando estaba viendo esta película, donde no se tiene la certeza, los giros en la trama y el notar que aquello que estaba sospechando no estaba del todo correcto, que nos dirigen a un final que realmente puedo decir que no lo esperaba, no tenía idea de como es que esto terminaría.
Basada de una novela escrita por Inger Ash Wolf (Michael Redhill) donde nos hace debatir sobre la existencia de Dios ¿esto sucedió de forma natural o ha sido creado por un ente poderoso llamado Dios?
Podría pensarse que la película va sumamente dirigida a que creamos en un Dios, en alguien divino, no en el Dios que se nos ha presentado en la religión sino alguien que nos está viendo, nos guía, nos está llamando, sin embargo, la película se desarrolla entre lo que podemos creer sobre los personajes (sobre todo en el personaje principal que aparentemente está envuelta en algo muy sucio) y en gran medida a como los actores llevaron su personaje.
El hecho de que toda la película se desarrolle en un pueblo de Ontario, también nos mete en un contexto completamente diferente, un pueblo donde casi nada sucede, los policías tienen un trabajo de ayudar a la comunidad y sobre todo a la jefa, una persona enferma que tiene bastantes problemas, agregando un estrés más intenso, donde personas están siendo asesinadas por alguien que cree ser parte de los cielos.
¿De dónde venimos, quienes somos, a dónde vamos? Son varias las preguntas que me hice cuando estaba viendo esta película, donde no se tiene la certeza, los giros en la trama y el notar que aquello que estaba sospechando no estaba del todo correcto, que nos dirigen a un final que realmente puedo decir que no lo esperaba, no tenía idea de como es que esto terminaría.
Carolina Santillan Cano
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